Se trata de un complejo formado por un Hotel 5*, una Bolera de 24 calles y un Centro Deportivo y Spa. El proyecto se encuentra muy próximo a unas ruinas arquitectónicas de valor histórico, concretamente un anfiteatro romano. Se plantea un estilo arquitectónico eclético que no renuncia a sistemas constructivos modernos pero que se integra con su diseño neoclásico en este particular entorno.
Los tres volumenes edificatorios se ubican en plan maestro entre ajardinamientos y pequeñas arquitecturas clásicas. Estos pequeños edificios alojan los servicios complementarios de cafetería, club social, pub, etc ...
El edificio del Hotel se organiza entorno a un gran patio central cubierto por una gran bóveda de vidrio. En la planta baja dispone de un porche perimetral que protege del soleamiento los disntintos salones y restaurantes de la planta de acceso.
El proyecto ofrece un concepto de arquitectura neoclásica , futurista en sus materiales constructivos, que dialoga con el entorno con respeto.